¡Febrero está aquí! Este es el mes en que vemos muchas decoraciones o golosinas en forma de corazón y de colores brillantes que no se parecen mucho al verdadero “tambor amortiguado” que bombea sangre que da vida por todo el cuerpo y hace posible nuestro viaje de vida.
Con el corazón en la mente, y porque estamos un poco (¡o mucho!) obsesionados con la hidratación, decidimos explorar la conexión entre la hidratación y la salud del corazón. Resulta que la hidratación juega un papel importante para mantener tu corazón sano y latiendo en su mejor forma.
La hidratación mantiene los músculos saludables (incluido tu corazón)
Anteriormente hemos escrito sobre cómo la hidratación es crítica para la salud muscular. La hipohidratación (falta de hidratación) limita la fuerza, potencia y resistencia muscular, y los hace más vulnerables a lesiones. Entre los músculos de tu cuerpo, tu corazón trabaja más duro que todos ellos. El corazón adulto promedio bombea alrededor de cinco litros de sangre por minuto, lo que equivale a casi 2,000 galones por día. Y es aún más si haces ejercicio, subes escaleras u otras actividades que aumentan tu ritmo cardíaco.
A diferencia de tus otros músculos, tu corazón nunca puede descansar, y debe trabajar aún más si estás deshidratado. Tu corazón es la central eléctrica que mantiene la sangre moviéndose por tu cuerpo. La sangre puede compararse con un equipo altamente eficiente de repartidores que llevan oxígeno y nutrientes a las distintas partes del cuerpo mientras se llevan el dióxido de carbono y los desechos. Cuando estás deshidratado, el volumen de sangre disminuye, lo que significa que hay menos “repartidores” para cumplir este papel vital. Tu corazón intenta compensar la deficiencia latiendo más rápido, trabajando más para asegurarse de que los músculos, órganos y otros sistemas del cuerpo reciban el oxígeno y nutrientes que necesitan. En contraste, mantenerse hidratado mantiene el volumen sanguíneo en un nivel saludable, lo que disminuye la carga cardíaca.
Un bajo volumen sanguíneo también puede causar otras complicaciones. Tu gasto cardíaco total es menor (a pesar de que tu corazón trabaja más) porque bombea menos sangre por latido. Además de latir más rápido, la deshidratación puede hacer que tu corazón trabaje más porque tu sangre es más espesa y no circula tan bien. Estas podrían ser algunas de las razones por las que estudios encuentran que una hidratación adecuada puede ayudar a reducir los riesgos a largo plazo de insuficiencia cardíaca.
La conexión entre la deshidratación y la presión arterial
Por extraño que parezca, la deshidratación puede llevar a niveles poco saludables de presión arterial baja o alta. Como se mencionó antes, la deshidratación puede reducir tu volumen sanguíneo. Tu corazón bombea más rápido para mantener la presión necesaria para circular la sangre adecuadamente, pero eso puede no ser suficiente si estás muy deshidratado. En situaciones graves de deshidratación, el bajo volumen sanguíneo puede llevar a hipovolemia o choque hipovolémico, una situación donde la caída de la presión arterial y la consiguiente falta de oxígeno entregado a tus órganos puede causar daño permanente.
El bajo volumen sanguíneo podría causar presión arterial alta porque cuando tu volumen sanguíneo baja, tu cuerpo libera niveles más altos de arginina vasopresina (también llamada hormona antidiurética), una hormona que ayuda a tus riñones a reabsorber agua en lugar de enviarla a la vejiga. Esto puede ayudar a ralentizar la pérdida de volumen sanguíneo, pero impide que tu cuerpo expulse los desechos tan eficientemente.
La vasopresina también causa que tus vasos sanguíneos se contraigan, aumentando tu presión arterial. Hay debate en la comunidad médica, pero algunos expertos sugieren que niveles persistentes y altos de vasopresina pueden causar que una persona desarrolle hipertensión a largo plazo, y los expertos coinciden en que la hipertensión crónica puede dañar tu corazón y otros órganos.
Hidrátate por el bien de tu corazón
Nuestros cuerpos son organismos complejos tan únicos como los copos de nieve. Ninguna cosa sola resolverá todas las preocupaciones de salud potenciales, y tu médico es el mejor guía para tus necesidades individuales de hidratación. Dicho esto, para la mayoría de nosotros, puedes reducir el riesgo de ciertas enfermedades relacionadas con el corazón y disminuir la carga de trabajo de tu corazón bebiendo mucha agua y equilibrando la ingesta de agua con electrolitos. Es una forma sencilla de decir gracias y mostrarle amor a tu corazón.
Fuentes
- Una buena hidratación puede reducir los riesgos a largo plazo de insuficiencia cardíaca—Instituto Nacional de Salud.
- Los efectos de la deshidratación en el sistema cardiovascular—Healthfully.
- ¿Puede la deshidratación causar presión arterial alta?—Healthcare Associates.
- Fisiología, volumen sanguíneo—Biblioteca Nacional de Medicina.
- Fisiología, vasopresina—Biblioteca Nacional de Medicina.
- Niveles de sodio sérico en la mediana edad en la parte alta del rango normal y riesgo de insuficiencia cardíaca—European Heart Journal.
- Sodio sérico alto normal en la mediana edad como factor de riesgo para el envejecimiento biológico acelerado, enfermedades crónicas y mortalidad prematura—eBioMedicine.
- 5 síntomas y señales clave de deshidratación—Reid Health.
- Deshidratación—Mayo Clinic.
- Hipovolemia—Cleveland Clinic.
- Peligros de la presión arterial alta: efectos de la hipertensión en tu cuerpo—Mayo Clinic.
- Mantenerse hidratado - Mantenerse saludable—American Heart Association.
- Insuficiencia cardíaca – líquidos y diuréticos—MedlinePlus.



